lunes, 6 de diciembre de 2010

"AL ZARCO HERRERA" Por Duncan Herrera Valladares (el perrito feliz)

Sigo siendo un perrito feliz, soy Duncan, un pequeño french que cada mañanita acompañaba al zarco Herrera en sus salidas a correr. 

De repente me cansaba un poco, pero siempre traté de mantener el paso del trote rápido, seguro, firme. Necesitaba del collar para no perderme, pero eso no limitaba mi instinto de oler cuanto se me ponía enfrente.

Con mis ojitos pequeñitos lograba vislumbrar la figura imponente de mi amigo Armando, no sabía de qué color eran sus ojos, pero me imaginaba que eran pardos porque le decían Zarco.... siempre pensé que de todas formas, era su mejor color porque significaba esperanza y vida!!!

Armando me daba de comer siempre a tiempo, pero mi rebeldía me hacía orinarme por doquier, nunca pude evitar la sensación placentera de marcar mi territorio y de cuidar a mi amigo que dormitaba de vez en cuando seguramente imaginando algo para luego ponerse a escribir.

Lo veía a cada rato muy pensativo y con una sonrisa coqueta que me daba la pauta para saber que algo se le había ocurrido y las teclas de su computadora volaban bajo sus dedos y su imaginación corría igual que cada mañana cuando salíamos y por calles pavimentadas, de tierra, bajadas y subidas, yo trataba de no cansarme...

La vez pasada vi al Zarco, tenía su taza de café, como siempre y estaba sentado bajo un árbol, leyendo, como siempre y en su Ipod sonaba una música, creo que era árabe o africana, vaya Usted a saber..... Me saludó y me dijo que seguía recorriendo el infinito y que en Saturno, si existía vida, porque EL vivía ahí....

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